Yo estaba haciendo una estancia de investiga- ción en Cambridge. Fue ahí donde me localizó José Ramón Benito y él me invitó al ITAM para una estancia sabática. Regresé a México, hice mi examen de doctorado y fue entonces cuando llegué al ITAM. Desde ese momento, Arturo Fernández, el rector, ya tenía en mente un libro de la historia del ITAM. Yo llegué en el 93 y en el 94 ya tenía el proyecto del libro del ITAM. Sin embargo, en el 96 cuando teníamos una prime- ra propuesta, esta no se pudo publicar lo que resultó ser positivo porque después encontré un archivo con mucha más información relevante para este libro y para reconstruir el pensamien- to de Don Raúl Baillères.